Cuevas costeras

En la zona acantilada litoral, en la actual Ruta dels Penya-segats que une las calas del Moraig y del Llebeig, se pueden encontrar unas humildes cuevas construidas en piedra seca y adosadas a la pared rocosa. Estas construcciones son del finales del siglo XIX y principios del XX. Tienen una edificación muy elemental, donde la pared de piedra delimita el espacio del habitáculo para prootegerlo de la lluvia y el sol.

 

Las cuevas solían tener sólo una entrada de dimensiones reducidas y en el interior el espacio no está diferenciado. Estas construcciones originales ubicaban zonas para encender fuego o algún pequeño cercado para la bestia de carga, en su alrededor. Los usuarios ocasionales de estas cuevas eran pescadores y agricultores de El Poble Nou de Benitatxell, que acudían a cultivar las pequeñas franjas de tierra de esta zona. También fueron utilizadas por contrabandistas que esperaban ocultos la llegada de laúdes o balandros cargados de tabaco, telas, etc. Las cuevas todavía conservan el nombre de sus propietarios.

 

Estas construcciones todavía se conservan prácticamente íntegras y son uno de los atractivos más importantes de la Ruta dels Penya-segats.

 

Cova les Morretes

 

Esta cueva está situada a los pies del acantilado que hay sobre la Cala del Moraig y fue construida aprovechando la cavidad producida por la erosión a los pies de la pared rocosa del morro. Está construida con piedra seca y mortero, y tiene varias estructuras: la vivienda, un horno para cocer pan y un pesebre para los animales.

 

Tiene un muro de piedra y barro que cierra la cavidad por el sudeste, una abertura al norte y otro lienzo de pared de mampostería que cierra la estructura al sur. En el interior hay dos bancadas de piedra y una ventana ciega en la que se han improvisado unos anaqueles. En el exterior, delante de la puerta de entrada, hay otro banco y una valla de piedra de unos 70 centímetros de altura que delimita con la pared rocosa un pasillo de unos 2 metros de anchura.

 

El horno de cocer pan es de plana redonda y se sitúa en el extremo de la valla de piedra. Detrás de la cueva hay una cerca de piedra seca de 1,5 metros de altura que forma con el acantilado el espacio usado como establo para los animales.

 

Cova del «ti Domingo l’Abiar»

 

La Cova del ti Domingo l’Abiar está situada a poca distancia de la anterior siguiendo la senda hacia el sur y todavía la utilizan como refugio ocasional algunos pescadores. Tiene tres muros de piedra seca que cierran la cavidad formada por la pared rocosa del acantilado. La puerta es la única abertura y se orienta al sur. Delante de la entrada, una roca cierra un espacio que se solía proteger del sol y la humedad con una tela de lona. A unos 10 metros hay otra estructura que se usaba como refugio de la bestia de carga. Una piedra de la pared sur de la cueva tiene grabada la fecha 1937.

 

Cova de «Pepet del Morret»

 

La cueva de Pepet del Morret está ubicada en el mismo acantilado, más hacia el sur, sobre la zona de la línea de costa denominada “els Pegats». La estructura consiste en una pared de piedra seca que cierra un espacio de dimensiones muy reducidas sobre la roca. La única abertura se cierra con una puerta de madera. La altura de la cueva es de dimensiones reducidas.

 

Alrededor de esta cueva hay estructuras de márgenes de contención con escalones para acceder de un nivel a otro y, al lado de la cueva, hay un espacio descubierto, delimitado por grandes rocas desprendidas del acantilado, donde se encendía fuego en un improvisado hogar y donde unas piedras hacen de mesa y de sillas.

 

También en el exterior, hay grandes rocas desprendidas de la pared, formando un pequeño túnel por donde tendremos que pasar para llegar a la siguiente cueva.

 

Cova del «ti Toni el Senyalat»

 

La Cova del ti Toni el Senyalat es una de las más amplias y consiste en un lienzo de piedra seca de 3,5 por 2 metros, que cierra una cavidad natural de 8 metros de anchura por 3,5 metros de profundidad. La única abertura se cierra con una puerta de madera y en el interior no hay ninguna estructura. El suelo de la cueva presenta diferentes niveles habilitados con márgenes de piedra.

 

Cova del Morro del Bou

 

Esta cueva está situada a los pies del Morro del Bou, a poca distancia de la Cala de Llebeig. Está construida con piedra seca y cierra una cavidad natural dejando una abertura para entrar. Delante de la cueva hay un espacio para hacer fuego protegido por la pared rocosa. La cueva aún se utiliza ocasionalmente por algunos pescadores.